sábado, 28 de abril de 2012

Es oficial: No creo en las personas.


"El ser humano es extraordinario" Se atreve afirmar Aquarius, y sí, yo lo admito, el ser humano es extraordinario. Extraordinariamente falso. Atenta totalmente a sus principios por sus propios intereses. No sabe querer. Rectifico: No sabemos querer. Nos creemos dueños de todo lo que vemos y tenemos las riendas sobre absolutamente NADA. Buscamos una verdad universal, y ni siquiera sabemos quiénes somos y qué diablos hacemos aquí y ahora. Nos inventamos a un Dios del que nadie tiene ni idea, y mucho menos de donde está cuando se le necesita y aun así nos hacemos llamar inteligentes.
No vivimos al día, pero no nos perdemos ninguna de nuestras noches. Noches de las que sólo hay flashes en nuestra memoria, porque no las recordamos. Vivimos como si nunca fuéramos a morir. Hablamos de amor a la ligera, y luego nos quejamos de que las relaciones personales están más despersonalizadas que nunca.
Lo fácil, lo previsible, está en nuestra lista de cosas que nos importan una mierda. Pero cuando algo viene defectuoso, con un atisbo de complicación nos acobardamos en el primer intento."¿Para qué intentarlo si sé que va a salir mal? " Está claro que si das por hecho que algo tiene salir mal, saldrá mal.
Creemos saber lo que queremos, y lo que no, pero cuando llegamos a lograr ese algo que teníamos en mente, lo dejamos en la lista de cosas que nos importan una mierda. Y seguimos buscando porque el hombre es un eterno insatisfecho. De ahí a que funcione la publicidad, esa publicidad que rechazamos porque nos engaña y es hipócrita. No, queridos, no, no nos miente, es un reflejo de todo lo que somos, de nuestra forma de ver las cosas. Sin publicidad, habría algunos que no sabrían cómo vivir. Es así de triste. Seguimos siendo niños en cuerpos de perturbados que no se encuentran ni en su propio reflejo.
Nadie cree en nadie. Pero qué importa eso ahora "si tú hoy me das lo que quiero". ¿Y qué queremos? Nos empeñamos en ser felices, cuando la felicidad no es algo más que un estado de ánimo, una forma de vida. Si quieres ser feliz, selo. Pero no te empeñes en ponerle topes, límites y subordinaciones cada vez mayores a tu felicidad. Y no, la felicidad no está destapando una cocacola. Así que, sé feliz por ti mismo, y serás feliz.Que no dependa de nadie cómo te sientas hoy. PORQUE NADIE VA A VENIR A SONREÍR POR TI.

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